Las lentillas de colores (o lentes de contacto) son muy cool, hasta puede funcionar para un cambio de look radical de un día, para hacer juego con nuestro maquillaje o cualquier accesorio. Sin embargo, no debemos tomar a la ligera su uso, pues debemos entender que los ojos son muy delicados.
Entonces, ¿podrían estas lentillas representar un problema para la visión? En este artículo vamos a hablar del uso de lentillas de colores y si de verdad afecta nuestra. Así que te invitamos a seguir leyendo.
Los posibles riesgos de usar lentillas de colores
De acuerdo a los oftalmólogos, el uso de lentillas puede irritar los ojos (alergia) y causar conjuntivitis, en casos de afecciones leves. Por el contrario, en casos extremos puede desencadenar infecciones y rapaduras en la córnea, posibles problemas de visión y hasta ceguera.
Por supuesto, para usar lentes de contacto es necesario tener una fórmula, que también pueden tenerla las lentillas de colores.
Los lentes de contacto de colores tienden a ser más gruesos que las lentillas tradicionales y esto genera una disminución de la entrada de oxigeno al ojo, lo que se traduce en sequedad e infecciones.
Otro factor importante es que las lentillas de colores están compuestas por una tintura opaca con líneas, formas y puntos que podrán dificultar la visión original. Además, está el hecho de que tienen a moverse con facilidad ante los parpadeos.
Entonces, ¿no podemos usar lentes de contacto de color?
Sí se puede, siempre y cuando estén recetados por el especialista, aún cuando no lo necesitamos para corregir nuestra visión. Lo ideal es ir a una óptica, obtener asesoramiento y elegir la lentilla de nuestro color preferido.
Asimismo, es necesario entender que no podemos comprar lentes en cualquier sitio online o en salones de belleza, mucho menos en tiendas de conveniencia o vendedores ambulantes, bajo ningún concepto.
Ahora bien, hay ciertas medidas a tener en cuenta si decidimos comprar lentillas de contacto:
La higiene es necesaria
Los lentes de contacto de color no deben ser compartidos con nadie. Además, debemos tener una buena higiene para maniobrar y retirar; siempre debemos tener las manos limpias antes de tocar los ojos.
Vale recordar que antes de guardar las lentillas, estas deben estar limpias. El proceso de limpieza se lleva a cabo con la solución de contacto que fue recomendada por el especialista o por el fabricante de las lentillas.
Deben ser guardadas solo en los envases originales o uno especial para guardar lentes de contacto.
¿Cuándo reemplazar?
Los lentes de contacto son frágiles, por eso hay que tratarlos con mucho cuidado. Debemos usarlos según las instrucciones y en horarios programados para evitar sufrir daños o molestias oculares.
Es válido leer las instrucciones para revisar la fecha de expedición y expiración y así podemos determinar su durabilidad.
Debemos quitarnos las lentillas de colores de los ojos si empezamos a sentir alguna incomodad en el ojo, evitar rascarnos o removerlas con brusquedad. Asimismo, debemos cerciorarnos de que no hay irritación o sequedad.